Overblog
Edit post Seguir este blog Administration + Create my blog


Cuando una pareja se rompe, y hay hijos de por medio el primer error que se comete en mi opinión, es el que acabo de cometer en esta misma apreciación que acabo de hacer, “hijos de por medio”.
Egoístamente empleamos esta forma de catalogar a personitas que no eligieron venir a este mundo, ¿por medio de qué? ¿Acaso tenemos tal afán de protagonismo que los consideramos algo que entorpece nuestra felicidad?
No, no es así, ellos no están en medio, están ahí, en nuestras vidas y nunca deberían ser algo que nos separa, somos nosotros los que decidimos hacerlo, nuestros hijos son algo que nos une y siempre será así, y no debería dolernos sino al contrario regocijarnos.
Los que hemos pasado por ahí, sabemos lo que ello significa, y que todo tiene un proceso, el proceso de la vida en si misma es así.
Todo empieza con amor, y cuando el amor acaba se sufre, y duele, duele mucho, y es ahí cuando puede salir lo peor de nosotros mismos, el engaño puede haber existido, pero a veces aun en ausencia de engaño nos sentimos engañados, y hacemos cosas que con el tiempo nos llegan a avergonzar, y después, con el paso del tiempo la herida cicatriza y se acaba el tiempo, porque la vida pasa, y tal como pasa la vida perdemos la oportunidad de pedir perdón, no para que ese amor vuelva, porque ese amor ya no existe, perdón por no haber sabido digerir el final de esa historia con dignidad.
Nuestro orgullo herido, si el nuestro, el de los últimos en dejar de amar, puede llevarnos actuar de manera que esas pequeñas personas que trajimos a este mundo lo pasen mal, y es que en nuestro afán de volver a encontrar la felicidad, nos obcecamos con que el camino para llegar a ella pasa por la infelicidad de nuestr@ anterior cónyuge, craso error.
Nuestros hijos tienen dos pilares, y tarde o temprano nos damos cuenta de la infelicidad de uno solo puede traerles perjuicio, y es ahí donde debemos ser fuertes, generosos y valientes, superar el odio, el rencor y perdonar, si , porque no somos maquinas, somos personas, tenemos sentimientos, incluso los que engañan los tienen, incluso los que mienten, e igual que se ama, se deja de amar un día, y cuando llega ese día, sufre el que sigue amando y sufre el que deja de hacerlo.
Esto solo es una humilde reflexión de un padre, un padre que no ha dejado de serlo desde el minuto uno, un padre que amó, dejó de ser amado y dejó de amar por este orden, un padre que se equivocó, que acertó, que rió y que lloró, si, que lloró mucho hasta que pudo comprender que nadie es mas culpable que nadie, un padre al que la vida no ha tratado ni mejor ni peor que a otros, pero hoy por hoy, un padre feliz, feliz por dos hijas maravillosas, feliz porque el rencor no ganó la batalla, la ganó el amor, el amor por esas personitas que al comienzo de este comentario malintencionadamente denominé “hijos de por medio”.
No es fácil, lo sé, no es fácil, pero pienso que como ser humano, nada puede honrarnos más que el amor por nuestros hijos, sin miedo a lo que se pierde por el camino, pero creedme…
¡VALE LA PENA!..........................LUISMI

Compartir este post
Repost0
Para estar informado de los últimos artículos, suscríbase: